El egipcio fue uno de
los pueblos menos belicosos de la Antigüedad, en gran parte a
causa de su geografía. Egipto goza de la
protección de una serie de fronteras naturales: accidentados desiertos al
este y al oeste, el Mediterráneo al norte y, al sur, una serie de cataratas
del Nilo (rápidos, en realidad) que impedían el paso tan eficazmente como si de murallas
físicas se tratase. De modo que al comienzo de su historia el estado faraónico
no necesitó de un ejército profesionalizado y permanente. Se puede decir que
Egipto llevó a cabo verdaderas guerras de conquista solamente después de la
lección aprendida tras el periodo de dominación hykso, tras lo cual los egipcios se vieron
obligados a alejar sus fronteras del Nilo para desviar la amenaza de nuevas
invasiones extranjeras.
Predinástico (c. 5300-3000 a.C.)*
Predinástico (c. 5300-3000 a.C.)*
En la época predinástica el anuncio de la
guerra se relacionaba con el acto de ensartarse el jefe de clan una pluma de
avestruz en los cabellos.
El primer ejército del que se tiene constancia en la zona data del 12.000-10.000 a.C. En la necrópolis del Paleolítico final de
Djebel Sahaba, actual Sudán, fueron encontrados varios individuos de diferentes edades y de ambos
sexos muertos por flechas, cuyas puntas todavía conservaban clavadas en los
huesos.
Paleta de los cazadores. Se pueden ver las plumas que llevan en la cabeza. Fuente: egiptología.com |
El jefe de clan a punto de matar a los prisioneros con un garrote. Esta imagen se verá repetida a lo largo de la Historia egipcia y aparece por primera vez aquí, en la tumba 100 de Hieracómpolis. |
Hombres con garrotes y lo que parece ser un escudo, en la misma tumba. |
El ejército ocupó un lugar destacado en la formación del Estado
egipcio, como nos hacen pensar las representaciones de ciudades amuralladas de
algunas paletas predinásticas. La necesidad de protegerse indica la existencia de un peligro real, proveniente de clanes y ciudades rivales, antes y durante la unificación de Egipto (sobre los orígenes de Egipto se habló aquí y aquí).
"Paleta de las ciudades", por las ciudades amuralladas que representa. Fuente:egiptoantiguo.org |
No obstante, estos primeros ejércitos tenían una
existencia efímera y estaban formados por efectivos poco numerosos, que eran
incorporados a la milicia solo durante el tiempo que duraba la campaña; acabada
esta los reclutas regresaban a sus poblados.
Cabeza de maza del "Rey Escorpión" (Narmer, en realidad) |
Armas
En este momento las armas aún se fabrican con piedra o hueso. A partir del IV milenio a.C. se empezó a usar el cobre, pero no sería hasta el Reino Antiguo (III milenio a.C.) cuando el uso de este metal se hizo más habitual.
En este momento las armas aún se fabrican con piedra o hueso. A partir del IV milenio a.C. se empezó a usar el cobre, pero no sería hasta el Reino Antiguo (III milenio a.C.) cuando el uso de este metal se hizo más habitual.
Las primeras armas documentadas se hallaron en la ya mencionada tumba 100 de Hieracómpolis, y estaban destinadas a la lucha cuerpo a cuerpo; consistían en primitivos palos y porras, que a
finales del Predinástico fueron convirtiéndose en mazas de piedra, en forma de disco o de pera, sujetas a un mango de madera. Destacan las mazas de Narmer (incluyendo la llamada "maza del Rey Escorpión", que en realidad pertenecería también a Narmer). También se usaron hachas de piedra, lanzas y venablos. Estas dos últimas armas apenas variaron a lo largo de la historia egipcia. Para atacar a distancia media usaban jabalinas, que podían alcanzar los 90 metros. En cuanto a los arcos, fueron el arma más sofisticada de la panoplia egipcia. Durante el Predinástico y el Reino Antiguo eran de dos tipos: de doble curvatura, elaborados con dos astas de animal unidas en el centro mediante un fragmento de madera, y de curvatura simple, hechos de una sola pieza de madera. También usaban hondas hechas con fibra de palmera o de lino, con proyectiles de piedra que podían alcanzar los 50 metros y una velocidad de 160 km por hora.
Cabezas de maza en piedra. Egiptología.com |
Para defenderse contaban con escudos de madera recubiertos de piel de bóvido o felino. En cuanto al calzado, hay que decir que los soldados egipcios combatieron descalzos a lo largo de toda la historia del antiguo Egipto
Reino
Antiguo (c. 3000-2125 a.C.)
Durante el Reino Antiguo el ejército aún seguía siendo a base de levas. Egipto no buscó el predominio sobre los pueblos vecinos, sino que la guerra era vista como una desagradable necesidad en los momentos en que los nómadas invadían territorios egipcios, o bien para apoderarse de botín (ganado, madera, prisioneros, etc.) en los territorios palestinos, libios o nubios cuando era necesario, y para imponer tributos. De hecho, la protección de las fronteras era el objetivo principal de estos limitados conflictos. Si el conflicto era menor, o en una zona muy concreta, los soldados eran reclutados entre los hombres de las poblaciones cercanas. Si la amenaza era mayor, entonces se reclutaba a hombres de todo el país. Y esto se hacía de manera similar a como se organizaban las expediciones a las minas o canteras, puesto que, a nivel local, la población masculina estaba organizada en una especie de milicia que actuaba como fuerza de trabajo o como soldados, según las circunstancias, y que era reclutada por los nomarcas en cada distrito administrativo (o nomos) cuando el faraón se lo pedía. Acabado el conflicto o la expedición, volvían a sus tareas. De manera similar se reclutó a los constructores de las pirámides.
Durante el Reino Antiguo el ejército aún seguía siendo a base de levas. Egipto no buscó el predominio sobre los pueblos vecinos, sino que la guerra era vista como una desagradable necesidad en los momentos en que los nómadas invadían territorios egipcios, o bien para apoderarse de botín (ganado, madera, prisioneros, etc.) en los territorios palestinos, libios o nubios cuando era necesario, y para imponer tributos. De hecho, la protección de las fronteras era el objetivo principal de estos limitados conflictos. Si el conflicto era menor, o en una zona muy concreta, los soldados eran reclutados entre los hombres de las poblaciones cercanas. Si la amenaza era mayor, entonces se reclutaba a hombres de todo el país. Y esto se hacía de manera similar a como se organizaban las expediciones a las minas o canteras, puesto que, a nivel local, la población masculina estaba organizada en una especie de milicia que actuaba como fuerza de trabajo o como soldados, según las circunstancias, y que era reclutada por los nomarcas en cada distrito administrativo (o nomos) cuando el faraón se lo pedía. Acabado el conflicto o la expedición, volvían a sus tareas. De manera similar se reclutó a los constructores de las pirámides.
El comandante en
jefe de estas fuerzas militares del Reino Antiguo recibía el nombre de
“supervisor de los soldados” (general) y las tropas estaban organizadas en
“batallones” de un tamaño desconocido. Los oficiales se distinguían de la
tropa, seguramente, por el uso de largos bastones de mando. El encargado de
organizar el ejército reclutado era un funcionario civil.
Libio |
No obstante, a pesar
de la inexistencia de un ejército permanente, sí existiría una pequeña fuerza profesional: la guardia personal del
faraón. Estaba compuesta por mercenarios libios y por un grupo algo mayor
de soldados egipcios. Los oficiales de esta tropa profesional eran miembros de
la corte y contaban con la plena confianza del faraón; poseían el título de
“director de los empleados del gran palacio”.
También es posible que los
nomarcas o gobernadores provinciales tuvieran una guardia personal, lo que
sería aprovechado en tiempos de inestabilidad política y disgregación del poder
central (Primer Periodo Intermedio) para convertirse en auténticos reyezuelos,
con ejército propio.
Armas
Para esta época el ejército egipcio siguió usando las armas ya conocidas en el Predinástico como arcos, hondas, jabalinas y lanzas. Pero el uso del cobre se hizo habitual a partir del III milenio a.C., sustituyendo en gran parte a la piedra, especialmente para hacer hachas, que en esta época consistían en una lámina curva con orificios para atar al mango. El empleo de espadas y dagas tuvo gran importancia ya desde el Periodo Tinita (dinastías I y II). Las primeras superaban los 40 cm de longitud, mientras que las segundas eran mucho más cortas y manejables. Podían ser de una sola pieza y estaban hechas de cobre.
Para esta época el ejército egipcio siguió usando las armas ya conocidas en el Predinástico como arcos, hondas, jabalinas y lanzas. Pero el uso del cobre se hizo habitual a partir del III milenio a.C., sustituyendo en gran parte a la piedra, especialmente para hacer hachas, que en esta época consistían en una lámina curva con orificios para atar al mango. El empleo de espadas y dagas tuvo gran importancia ya desde el Periodo Tinita (dinastías I y II). Las primeras superaban los 40 cm de longitud, mientras que las segundas eran mucho más cortas y manejables. Podían ser de una sola pieza y estaban hechas de cobre.
Como elemento defensivo seguían teniendo el escudo, realizado en madera y recubierto con piel de animal (y, a veces, con placas de cobre), de un tamaño variable (de 50 cm a 1,50 m). Otro elemento protector nuevo será una pieza de lino endurecida y triangular, que se colocaba sobre el faldellín protegiendo los genitales y una pieza de tejido que cubría los hombros y el pecho.
Reino Medio (c. 2055-1650 a.C.)
A partir de la XII dinastía (Reino Medio) las cosas cambiarán: tras el enfrentamiento fratricida entre el linaje tebano y el heracleopolitano del Primer Periodo Intermedio, empezó a hacerse patente la necesidad de un ejército permanente, bien pagado, que defendiera los intereses de sus reyes y mantuviera a raya a los nomarcas.
Reino Medio (c. 2055-1650 a.C.)
A partir de la XII dinastía (Reino Medio) las cosas cambiarán: tras el enfrentamiento fratricida entre el linaje tebano y el heracleopolitano del Primer Periodo Intermedio, empezó a hacerse patente la necesidad de un ejército permanente, bien pagado, que defendiera los intereses de sus reyes y mantuviera a raya a los nomarcas.
Estaba
formado exclusivamente por soldados de infantería: lanceros egipcios y arqueros
nubios, como vemos en las maquetas de Meseheti.
Lanceros egipcios. |
Arqueros nubios. Nubia era conocida como "La tierra del arco". |
Además, se empezarán a llevar a cabo auténticas campañas militares de
conquista en territorio nubio, para establecer sólidas bases comerciales e
imponer tributos y guarniciones permanentes que controlaran el territorio. De
modo que sabemos que a partir del Reino
Medio el ejército se hizo permanente y se componía de dos cuerpos
distintos:
- El de los recién reclutados.
- El de los soldados profesionales, dentro de los cuales había un cuerpo de élite conocido como “tropas de guerreros”.
Todos ellos estaban repartidos en regimientos, de cuyo número no tenemos
información.
A la cabeza del ejército estaba el faraón, que tomaba las
decisiones sobre cómo actuar junto a su ministro de la guerra, mientras que la
dirección de las tropas en combate recaía sobre el “general”. Este, a su vez,
disponía de varios subordinados: el “comandante de los reclutas” y el
“comandante de las fuerzas de choque”.
También existían unos “escribas del
ejército”, encargados de la intendencia.
Además, en esta época se crean una serie de fortificaciones al norte y al sur
de la 1ª y 2ª catarata del Nilo, para controlar a los nubios, acompañadas
de una serie de puestos de control de menos importancia.
Frontera sur, hecha en el año 8, bajo la majestad del rey del Alto y del Bajo Egipto, Jakaura Senuseret III a quien se dé vida para siempre jamás; para prevenir que ningún negro pueda cruzarla, por agua o por tierra, con un barco, o rebaño de los negros; excepto un negro que venga a comerciar en Iken [fortaleza de Mirgissa] o con un mensaje. Todas las cosas buenas deben ser hechas con ellos, pero sin permitir que un barco de negros pase por Heh [¿fortaleza de Semna?], yendo corriente abajo para siempre. Estela de Senuseret III en Semna.
Estructuralmente
hablando, todas estas fortalezas siguen un patrón semejante. Se pueden
distinguir dos tipos de fuertes:
- Los situados al norte de la 2ª catarata, emplazados en la ribera del Nilo, más grandes que los del sur. Albergaban a grandes poblaciones en su interior (comerciantes, artesanos, familiares de los soldados, etc.)
Fortaleza de Buhen |
- Los situados al sur de la 2ª catarata, erigidos sobre los farallones rocosos que flanquean el río.
La distribución era
ortogonal, con calles dispuestas en ángulos rectos y zonas destinadas a
almacenaje, armerías, acuartelamientos, etc. Las murallas eran de adobe y de
hasta 5 metros de espesor y hasta 10 metros de altura, con torreones, barbacanas y un
foso seco para dificultar el asalto. Las condiciones de vida eran muy duras,
por el calor, estar lejos de la familia y, sobre todo, por el constante peligro de ser asaltados por
los fieros guerreros nubios. No obstante, los escribas llevaban a cabo un
registro minucioso, hasta de los más insignificantes acontecimientos.
Otros seis nubios llegaron a la fortaleza “Poderoso es Jakaure, el difunto” para hacer algunos intercambios según esto […] en el cuarto mes de la segunda estación, día 8. Lo que trajeron fue intercambiado. Navegaron hacia el sur el mismo día hacia el lugar de donde venían. Despacho de Semna.
No obstante, el
ejército egipcio contaba entre sus filas a mercenarios nubios, entre los que destacan los llamados “medjais”,
reclutados para llevar a cabo funciones policiales, sobre todo en el desierto,
que conocían bien. Pero también en las ciudades, teniendo fama de duros. Solían ir acompañados de un babuino entrenado para perseguir a los delincuentes.
Egipto contaba con otra línea defensiva: “los caminos de Horus”, una serie consecutiva de fortines situados en la parte oriental del
Delta, que impedían el acceso no deseado de asiáticos por la línea costera.
En
el oeste se creó una nueva línea de fortalezas, en el Wadi Natrón, para frenar
a los libios.
Arquero con carcaj |
Armas
Tras el Primer Periodo Intermedio se introdujo el uso del bronce para fabricar armas. Las hachas van a adquirir ahora una forma de pico de pato, de influencia asiática. Los arcos, al igual que armas anteriores, se seguirán usando; las flechas se guardarán ya en carcajs que portaba el soldado y sus puntas seguirán siendo de madera endurecida al fuego, piedra o hueso, pues el bronce era demasiado costoso como para desperdiciarlo en proyectiles que podían no recuperarse. Como elementos protectores seguimos encontrando los mencionados para épocas anteriores, principalmente el escudo, con la parte superior redondeada o apuntada como vemos en las maquetas de Meseheti.
Pero la época más belicista y expansiva aún estaba por llegar: el Reino Nuevo. Tras la ocupación hyksa durante el Segundo Periodo Intermedio, y su posterior expulsión, los faraones van a convertirse en auténticos faraones-guerreros, alcanzando el imperio egipcio su máxima expansión en tiempos de Tutmosis III, cuando el dominio egipcio se extendió desde la 4ª catarata del Nilo hasta el río Éufrates. Comenzaba la edad de oro del antiguo Egipto...
Tras el Primer Periodo Intermedio se introdujo el uso del bronce para fabricar armas. Las hachas van a adquirir ahora una forma de pico de pato, de influencia asiática. Los arcos, al igual que armas anteriores, se seguirán usando; las flechas se guardarán ya en carcajs que portaba el soldado y sus puntas seguirán siendo de madera endurecida al fuego, piedra o hueso, pues el bronce era demasiado costoso como para desperdiciarlo en proyectiles que podían no recuperarse. Como elementos protectores seguimos encontrando los mencionados para épocas anteriores, principalmente el escudo, con la parte superior redondeada o apuntada como vemos en las maquetas de Meseheti.
Soldados con arco, hacha y maza. Fuente: Egiptología.com |
(aquí puedes ver la parte II sobre el ejército egipcio, en el Reino Nuevo).
*La cronología está tomada de "Historia del antiguo Egipto", Ian Shaw.
Bibliografía y webgrafía:
- TARANCÓN HUARTE, Nerea."Antes de la batalla:
los preparativos para la guerra en el Egipto faraónico".
Antesteria, debates de Historia Antigua, Universidad complutense de
Madrid. 2013, nº 12, pp. 39-50.
- TARANCÓN HUARTE, Nerea. "Después de la batalla: el trato al enemigo en el
contexto militar del Egipto faraónico". Arqueo_Uca, 2012, nº 2, pp 29-41.
- KEMP, Barry J. 1996: El antiguo Egipto, anatomía de una civilización. Ed. Crítica. España, Barcelona
- SHAW, Ian. (2007): Historia del antiguo Egipto. Ed. la
esfera de los libros. España, Madrid.
- WILKINSON, Toby. (2011): Auge y caída del antiguo Egipto.
Ed. Debate. España, Barcelona.
- CIMMINO, Franco. (2002): Vida cotidiana de los egipcios. Ed.
Edaf. España, Madrid.
-PARRA ORTIZ, J.M. (2003): Gentes del valle del Nilo". Ed. Complutense. España, Madrid.
-DONADONI, Sergio (1992): El hombre egipcio. Ed. Alianza Editorial. España, Madrid.
-MARTÍNEZ BABÓN, J. "El poderoso ejército de Tutmosis III". Historia National Geographic. 2013, nº 115, pp. 30-39
-CASTEL, Elisa. "El armamento de los antiguos egipcios". Historia National Geographic. 2006, nº 28, pp. 15-18
- ESTRADA LAZA, F. "El ejército de los faraones". Historia National Geographic. 2008, nº 54, pp. 32-43
-http://www.nachoares.com/articulos/reyes-oficiales-y-soldados-descripcion-del-ejercito-egipcio/ . Consulta: 21 diciembre 2014.
Magnífico trabajo María Isabel, estupendo para seguir aprendiendo... se agradece!!
ResponderEliminarGracias a ti por leerlo, Dolors ;)
EliminarGran trabajo Isa, aunque me han sorprendido dos cosas:
ResponderEliminar- Que en el lanzamiento de jabalinas podían alcanzar los 90 metros, (pobres jabalinas).
- Que los soldados egipcios combatieran descalzos. (pobres pies).
Gracias y a la espera de “El ejército egipcio (parte II) ;-)
Gracias, Mariano. Pronto pondré la segunda parte ;) y sí, pobres pies y pobres jabalinas...creo ja, ja.
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