Páginas

martes, 30 de diciembre de 2014

Reseña: "El último sueño de Cleopatra"

Buenos días, amigos del templo de Seshat. Como os dije aquí hace unas semanas, el Museu Egipci de Barcelona organizó un concurso, en el cual gané un ejemplar de la última novela de Christian Jacq, el último sueño de Cleopatra.
Un mes después recibí el libro en mi casa y, como os prometí, después de haberlo leído os dejo la reseña del mismo en el blog, para los que estéis pensando si comprarlo o no.
Sinopsis: Hay muchos libros sobre Cleopatra, solo este es de Christian Jacq. La majestuosa reina del Nilo cobra vida de la mano del incuestionable maestro del género.
«La reina estaba desnuda. Desde la terraza de su palacio, Cleopatra observaba, sin duda por última vez, su querida capital, la deslumbrante Alejandría. El viento suave de la noche no calmaba su irritación. Ella, la soberana de Egipto, tierra amada por los dioses, la cual había creído conquistar y la cual perdía, ella, la dueña absoluta de un rico país, ¡reducida a la soledad y a la impotencia!». Así arranca una de las novelas más anheladas por los lectores de Christian Jacq tras largos años de espera y numerosas peticiones para que abordara el personaje de Cleopatra. Una novela en la que cobra vida la hábil estratega que liberó a Egipto del yugo romano. La mujer cuya extraordinaria belleza, envuelta en oro y piedras preciosas, ocultaba una inteligencia y una ambición únicas. La seductora infatigable que enloquecía a los hombres. El gran amor de César. La leyenda personificada. El último sueño de Cleopatra es un retrato único de la majestuosa reina del Nilo por el maestro del género, el novelista y egiptólogo Christian Jacq.

Comentario: Al leer la sinopsis pensé que esta novela abarcaría toda la vida de la mítica reina, incluyendo su suicidio al verse derrotada por el futuro Augusto. Sin embargo, los lectores no deben llevarse a engaño, pues la novela se centra principalmente en la etapa del romance con Julio César (a juzgar por el epílogo, Marco Antonio no parece ser un personaje muy estimado por este escritor francés, quizás por ello omita toda esta parte de la vida de la reina). La novela comienza durante el reinado de Cleopatra y su hermano Ptolomeo XIII, con el cual comparte el reino; no obstante, las intrigas políticas del eunuco Potino y otros cortesanos ambiciosos obligan a Cleopatra a exiliarse para evitar ser eliminada; de ahí la pesimista descripción de la sinopsis. 
Algo que me ha llamado la atención, y no precisamente para bien, es el hecho de que, apartándose de descripciones más recientes y seguramente más realistas sobre la reina en novelas como "La hija del Nilo", Cleopatra es descrita como toda una belleza, además de muy inteligente. Es curioso que el autor  recurra una vez más a esta imagen de la reina griega, pues ya es de sobra conocido que la belleza arrebatadora de Cleopatra VII no debió ser tal.
Poco parecido habría entre la Cleopatra real y las actrices que la han interpretado. En la imagen, Monica Bellucci en Asterix y Obelix: Misión Cleopatra.
Como decía, la trama se centra en la guerra civil entre los dos hermanos de la familia Ptolemaica. En ese momento entra en escena el vencedor de Farsalia, Julio César, cuyo enemigo Pompeyo es convenientemente eliminado por parte de Ptolomeo XIII y Potino, con el fin de ganarse el favor de César en la lucha contra Cleopatra. No obstante, ésta cuenta con la ayuda de un misterioso mago egipcio, que a pesar de recordarle continuamente a la reina que es griega y que los suyos no han respetado las tradiciones de los antiguos egipcios, irónicamente se llama Hermes, que de egipcio tiene poco; además, en ocasiones este sacerdote-mago egipcio tiene más de mago Gandalf que de un hombre sabio del antiguo Egipto. No digo más para no meter spoilers, pero es protagonista de varias escenas poco realistas que le quitan realismo a la historia, que al fin y al cabo está basada en hechos históricos. Otros personajes que comparten escena con la reina son su sirvienta Carmión (ni idea de por qué Jacq ni menciona a su otra famosa sirvienta Iras), el fiel sirviente Apolodoro y un personaje al que el autor denomina como el "Viejo", una especie de guía de Cleopatra durante su exilio, que en el resto de la trama se limita a beber vino, básicamente. No he entendido muy bien este personaje, al que siempre acompaña un inteligente burro llamado "Viento del norte", un nombre que les sonará a los que hayan leído varias novelas de Christian Jacq.
La última parte de la novela se centra en la guerra de Alejandría, y en la manera en que César va conquistando poco a poco la ciudad. De manera que es el romano el verdadero protagonista de la segunda mitad del libro. El personaje de Cleopatra pasa a un segundo plano, para dar más relevancia a su amante romano y al bando de Ptolomeo XIII. Por tanto, la aparición de la reina se limita a escasas apariciones junto a Hermes y escenas de alcoba con el imperator romano. De tal modo que la que se supone protagonista de la novela apenas tiene relevancia en los acontecimientos, lo que es un enorme error.
Tras la victoria del bando de Cleopatra, la novela se precipita hacia su final de manera demasiado rápida, como si Jacq hubiera tenido prisa por acabar la novela. Del último sueño de Cleopatra que da título a la obra, es decir, el renacer de la edad de oro de Egipto, apenas se hace mención. Una vez más, como en la anterior novela que leí sobre Cleopatra, el autor se centro demasiado en las "batallitas".
Lo mejor: el epílogo contado en primera persona por Jean François Champollion. La mención a que Alejandría, sus monarcas y sus ciudadanos habían olvidado la sabiduría y las tradiciones del antiguo Egipto, pues en la mayoría de películas o novelas sobre este periodo de la historia de Egipto a menudo se olvidan de que eran los griegos los dueños del país, imponiendo su cultura y su lengua. Los campesinos egipcios, como bien refleja Jacq, eran vistos como simples pagadores de impuestos, explotados para costear los lujos de Alejandría y para sobornar a los romanos, con el fin de quitarles la idea de apoderarse de Egipto.

Lo peor: el personaje de Hermes. La poca relevancia que se le da a la que se supone debiera ser la protagonista de la novela, es decir, Cleopatra, sobre todo en la segunda mitad del libro. El enamoramiento rapidísimo y poco creíble entre la reina y César desde su primer encuentro, momento a partir del cual la reina apenas habla o da su opinión, si no es en la alcoba de su amante. Guapa y callada, Cleopatra se nos presenta de manera similar al personaje de Sigourney Weaver en Exodus, lo que supone desaprovechar a un personaje que podría haber sido mucho más carismático e interesante.
 Aunque no tenga que ver con el argumento, también me resulta un "pero" el precio que puede llegar a tener un libro (este en concreto 21 €). Porque, aunque en esta ocasión a mí me ha salido gratis, es una pena que la cultura sea tan cara. Con precios más económicos (y más en los tiempos en que estamos) sin duda se fomentaría la lectura. 
En resumen, este libro de Christian Jacq me ha decepcionado un poco, pues siendo un gran amante y conocedor del antiguo Egipto como es una se esperaba que su versión de Cleopatra fuera diferente a la típica de mujer-florero del cine. Y más teniendo en su bibliografía personajes tan poderosos y carismáticos como Ahotep de "la reina libertad", Clara "la mujer sabia" de la tetralogía "La piedra de luz" o Nefertari, de la pentalogía "Ramsés", sin duda su mejor obra.
En El corte inglés viene como regalo junto a la novela un interesantísimo librito con explicaciones claras y concisas sobre los primeros reyes y el origen del Estado faraónico, también escrito por Jacq. Sobre los orígenes de Egipto y la dinastía 0 yo también hablé aquí y aquí.
Bueno, lectores. Espero que os haya resultado útil e interesante la reseña. Sin embargo, como siempre digo, no hay mejor manera de formarse una opinión sobre un libro o película que viéndola o leyendo uno mismo. Quizás esta sea una buena petición como regalo de reyes.
Sin más, la diosa y yo os deseamos una feliz Nochevieja y un próspero año 2015, el cual vendrá cargado de nuevas entradas sobre el antiguo Egipto.


2 comentarios:

  1. Enhorabuena Isabel, no solo por esta nueva crítica en tu blog, sino por ganar este libro como premio del concurso organizado por el Museu Egipci de Barcelona.

    Una vez más a Cleopatra VII nos la muestran como una mujer de extraordinaria belleza, aunque se tengan referencias de que no era tanto el atractivo exterior como el que sí tenía interiormente, de mujer instruida en los idiomas, literatura, música, política, astronomía, matemáticas y medicina, pero siempre vende más imaginarla parecida físicamente a Elizabeth Taylor o Monica Bellucci, que solo intelectualmente a Hypatia de Alejandría.

    Ahhh y creo que los personajes de Viejo y Viento del norte, no son tanto para entenderlos sino para relajar nuestra atención a modo de simpáticos cameos al más puro estilo de Alfred Hitchcock ;-)

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Mariano. Sin duda en el cine vende más una Cleopatra hermosa como la Bellucci a una poco agraciada o directamente fea, pero una esperaría más fidelidad a la Historia por parte de un egiptólogo. O, al menos, no ser tan repetitivo en decirnos cada poco tiempo que era hermosísima y que tenía un cuerpo 10, eso solo alimenta el mito. Con esto no quiero decir que la reina fuera fea, pero sin duda sus cualidades más destacadas eran otras. Viento del norte es un viejo conocido para los lectores de Christian Jacq, esta autor suele darles un papel muy importante a los animales. Por ejemplo, el león y el perro de Ramsés en su pentalogía sobre este faraón. Sigo pensando que "el Viejo" es un personaje prácticamente innecesario (no así su burrito je, je que aporta más a la historia que su dueño). Un abrazo :)

      Eliminar

Hola, ¿Me dejas un comentario?

Blogging tips
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...